Tu estás aquí en la tierra por que Dios te creó. Y el propósito es que puedas vivir el excelente plan que Él diseñó para ti. Te preguntarás ¿porque estoy obligado a vivir lo que Dios dice? Te entendemos, déjame disfrutar lo que yo quiero. Es sencillo. Primero Él te conoce completamente. No hay nada oculto en tu vida para Dios, ni tus pensamientos, ni las intenciones más profundas que a nadie has compartido. Segundo Él sabe que te vas a equivocar a causa del pecado y por eso quiere ayudarte a que vivas tu vida, no que sobrevivas en este mundo.
Ese plan lo vivirás tu y será personal. Pero hay principios que Dios quiere que tu tengas. Jesús lo resumió en esta frase:
Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo. – Lucas 10.27
- Servir: Ayudar a otros que necesitan del amor de Dios.
- Crecer: Madurar y crecer como persona. Conociendo, alimentándote y viviendo la palabra de Dios.
- Vivir en comunión: Vivir junto con otros cristianos las experiencias y pruebas de la vida, unidos en el amor de Dios.
- Compartir: Hablar a otros de Cristo, mostrando el único camino para volver a tener una relación personal con Dios y así más puedan ser discípulos de Cristo Jesús.
- Adorar: Dios es Espíritu y exige que quienes le adoren lo hagan en espíritu y verdad. Es un privilegio poder acercarse libremente a Él, por medio de Cristo Jesús, y disfrutar de Él.
Cuando vivas estos principios por los que Dios te creó, disfrutarás la vida. Entenderás que la felicidad está en vivir para Dios mismo y descansarás con la paz que Cristo prometió a quienes le reciben.
En resumen podemos decir ¿Porque estás aquí en la tierra? para Dios porque Él es para ti.